Mayo ya está aquí y hay que empezar a pensar en las bodas que tendrán lugar este verano. Julio y septiembre son los meses en los que se casan mis amigas y la búsqueda de los vestidos no puede retrasarse mucho más.
Siempre he sido un poco descuidada en este tema y he de reconocer que nunca me ha ido mal. En dos ocasiones, he tenido la suerte de encontrar el vestido perfecto dos días antes de la boda, lo que confirma que bajo presión funciono mucho mejor 🙂 Pero en esta ocación me he adelantadao, he estado viendo revistas, revisando pasarelas y, de momento, estas son mis propuestas.
Me encantan los vestidos largos, con volumen y mucha caída, con los que caminas y parece que el vestido lo hace contigo. En ellos, siempre intento evitar los cortes lisos y las telas rígidas. Nada mejor que un vestido con movimiento para disfrutar de una buena velada.
El modelo Heraldic de Hannibal Laguna es, sin duda alguna, mi favorito. Lo primero porque es rojo, y a la boda de julio tengo que ir vestida de ese color y lo segundo, por la forma, por la caida de su tela y por el movimiento que tiene.
(Foto oficial Hannibal Laguna)
El modelo Cangas de Pronovias también es una buena opción. No apostaría por ese color, pero el vestido me parece elegante.
(Foto oficial Pronovias)
En tono rosa y con un corte distinto, el modelo Canaleta es también una buena apuesta para Pronovias.
(Foto oficial Pronovias)
Y por último, en color coral y también de Pronovias, el modelo Comedia gana posiciones. Con menos movimiento en la falda y cuerto drapeado, este precioso vestido largo es también ideal para una boda de noche en pleno verano.
(Foto oficial Pronovias)
Y bien, ¿Qué modelo elegirías para ir de boda? Personalmente, yo me quedo con Hannibal Laguna. Un genio a la hora de vestir a la mujer con elegancia y resaltar su feminidad. Unos buenos tacones y unos pendientes largos son los únicos complementos que le hacen falta a ese diseño que me ha enamorado.